Su perrito Blackie lo salvó de morir quemado - Primerahora.com

Su perrito Blackie lo salvó de morir quemado - Primerahora.com: "Su perrito Blackie lo salvó de morir quemado"

Su perrito Blackie lo salvó de morir quemado
Gracias a su perro Blackie, Jesús Cancel logró salir ileso de su residencia mientras ésta se incendiaba. (Para Primera Hora / Nelson Reyes Faría)
miércoles, 1 de septiembre de 2010
Wilma Maldonado Arrigoitía / Primera Hora
Si no llega a ser por los ladridos y los golpecitos que su perro Blackie le dio, don Jesús Cancel Ruiz hubiese muerto quemado en su casa en el sector La Nueva, del barrio San Antonio, en Quebradillas.

Don Jesús, un porteador de carro público de 66 años de edad, se acostó a dormir a la espera del paso del huracán Earl y se llevó una vela al cuarto porque todo el sector estaba a oscuras por falta de energía eléctrica.

Como a las 12:30 de la madrugada de ayer, se levantó por los insistentes ladridos de su perrito y porque no dejaba de rasparlo para avisarle que un fuego se desataba en esa habitación.

“Yo fui corriendo a la cocina y busqué agua, porque tenía todavía, pero se me viró por el camino. Cuando fui a buscar más agua, ya todo estaba prendido. Me quedé con esta ropa que tengo puesta”, comentó don Jesús, quien tiene problemas de movilidad por una afección en las piernas.

Los vecinos corrieron a socorrerlo y luego de pasar varias horas en el Centro de Diagnóstico y Tratamiento, don Jesús está vivo para contar su historia.

“Este perro me salvó la vida”, comentó este quebradillano mientras alzaba en sus manos a su mascota.

Blackie, un pequeño perrito blanco y negro, ayer seguía al cuidado de su dueño a quien no le perdía ni pie ni pisada.

Aunque don Jesús vive solo, su casa estaba llena ayer de familiares y vecinos que limpiaban la casa y lo cuidaban. A la vez estaban preocupados por buscar un lugar en el que pudiese pernoctar en lo que se reconstruye la residencia en la que perdió todo.

La situación de don Jesús se agrava porque desde hace siete meses no puede conducir su carro público por los problemas que tiene en sus piernas.

En la región norte, el paso del huracán también causó daños a otras dos familias que perdieron sus pertenencias porque los techos de sus casas colapsaron.

El director regional de la Aemead, Ángel Pérez, señaló que en la comunidad Los Naranjos, en Vega Baja, una familia de 11 miembros perdió todas sus pertenencias porque el techo de la casa no resistió los vientos y la lluvia que trajo Earl. En Hatillo, una residencia en Carrizales también sufrió pérdida de pertenencias porque el techo cayó, dijo el alcalde de este municipio, José “Chely” Rodríguez.